Nacido el 8 de mayo de 1753 en la hacienda de Corralejo en Pénjamo, Guanajuato, se ordenó sacerdote en 1778; fue maestro de Teología y Filosofía, promotor de la agricultura y la industria.
Se unió en 1809 a un grupo secreto que buscaba la independencia de la Nueva España, siendo quien en la madrugada del 16 de septiembre de 1810, con un estandarte de la Virgen de Guadalupe como bandera dio el llamado Grito de Dolores; convirtiéndose en cabeza de la lucha independentista; fue derrotado en enero de 1811 y capturado cuatro meses después, para ser llevado a Chihuahua, donde fue fusilado el 30 de julio de ese mismo año; así lo manifestó la regidora Elisa Irene Palafox Valenzuela, al fungir como oradora oficial en la ceremonia y guardia cívica que el Gobierno Municipal de Cajeme organizó para conmemorar el 210 aniversario del fallecimiento de Don Miguel Hidalgo y Costilla, “El padre de la patria”.
En representación del Alcalde Sergio Pablo Mariscal Alvarado, el Director de Educación Municipal, Manuel de Jesús Verdugo Verduzco, señaló que Miguel Hidalgo renunció a los privilegios emanados de su familia, llegó a ser cura de Dolores y parte fundamental en la trayectoria de México, por lo que su ejemplo de lucha debe ser orgullo para todos los mexicanos.
Acudieron al evento cívico la Presidenta del Voluntariado DIF Cajeme, Arlen Margarita Mariscal Vélez; el Mayor de Infantería Juan Silva Alcantara, en representación del Coronel de Infantería Diplomado del Estado Mayor, Juan Casillas Marroquín, Comandante del 60 Batallón; el Suboficial José Osuna Orozco, en representación del Inspector Jefe de la Guardia Nacional, Luis Bernardo Villarreal Villarreal; el Subdirector de Acción Cívica, Fernando González Meza; Directora del Instituto Cajemense de la Juventud, Anahí Vega Borbón y la coordinadora del ICJ, Sandra Carbajal.