Mexicanos lideran la salvación en ‘La purga por siempre’; ya está en cines

La cinta La purga por siempre en esta ocasión se desarrolla en la frontera entre México y Estados Unidos. El director mexicano Everardo Gout recurrió a la fuerza de sus compatriotas Ana de la Reguera y Tenoch Huerta para contar esta historia que estrena este fin de semana.

En esta nueva entrega de la saga creada por James DeMonaco, e iniciada con The Purge (La noche de la expiación) de 2013, De la Reguera interpreta a Adela, quien junto con su esposo Juan (Huerta) trata de adaptarse como inmigrante recién llegada a Estados Unidos.

Pero cuando llega el momento de luchar contra la purga, un evento anual donde están permitidos asesinatos, violaciones y todo tipo de crímenes que se amplía más allá de las 12 horas establecidas hasta ser “para siempre”, Adela toma las armas y combate junto a los hombres.

“¿Dónde están las mujeres fuertes en las películas? ¿Dónde están las mujeres como mi mamá que me educó junto a mis hermanos? De 40 años, compleja, completa, hermosa. Eso me entusiasmaba mucho poder hacer”, señaló Gout.

En cuanto a Huerta, el cineasta, que con este filme hace su debut como director de Hollywood, indicó que siempre lo tuvo en mente. El actor mexicano protagonizó su ópera prima, Días de gracia, y ha siempre se ha manifestado en contra de la violación de los derechos de los inmigrantes y el racismo.

En La purga por siempre Huerta interpreta a un entrenador de caballos con habilidades casi mágicas para controlar a los animales, que sin embargo es rechazado por los prejuicios de Dylan Tucker (Josh Lucas), el hijo blanco del dueño del rancho donde trabaja.

“Sabía que era el mejor actor para este rol, entonces me subí a mi caballo con el estudio para decir ‘yo quiero a Tenoch y no voy a ver a nadie más hasta que no me demuestren ustedes que hay un mejor actor allá afuera’. Nunca llegó el video porque no había nadie mejor”, destacó el cineasta.

A diferencia de Adela, que se esfuerza por aprender inglés, Juan no quiere hacerse pasar por uno más ni olvidar sus orígenes.

“Creo que la autenticidad que le imprime Tenoch es muy importante y al contrario, lo que le dije a James (DeMonaco) fue ‘usemos su acento, usemos su imperfección del inglés’”, contó el director.

Cuando la purga sale de control, mexicanos y estadounidenses buscan por igual refugiarse en México.

“Tiene muchas ironías y muchos mensajes que son importantes. La película nunca se cae de su caparazón de ser una película de horror y un thriller… (pero) con ese caparazón el oleaje puede ser político, puede ser racial, puede ser lo que sea porque es orgánico para los personajes”, subrayó Gout.

La historia nos lleva a pensar qué pasaría si realmente se hiciera algo como la purga, sobre todo al ver los niveles de intolerancia y violencia que se han vivido en Estados Unidos a raíz de la pandemia y con acontecimientos como el asalto al Capitolio en enero.

“Obviamente la filmamos antes de todo el desastre que sucedió en Estados Unidos en el último año, pero creo que eso es la genialidad de James DeMonaco, que tiene la clarividencia de ver cinco minutos en el futuro. Es una película de la actualidad. Si vinieran unos ‘aliens’ a la Tierra, creo que sería una de las 10 películas que representan quiénes somos”, acotó el director.

Y cuando parece que la complicada relación entre México y Estados Unidos ha quedado de manifiesto, el filme recuerda que antes de la frontera estaban los pueblos nativos americanos. En un papel destacado, un aliado indígena que los guía por el desierto (interpretado por Gregory Zaragoza) señala que ellos llevan 500 años luchando contra la opresión y el exterminio.

“Nos echamos un clavado profundo en los pueblos indígenas, sobre todo los que son méxico-americanos porque hay varias tribus que sí tienen la doble nacionalidad y que justo en la era de Trump las estaban tratando de segregar y era un desastre”, agregó Gout.

Detrás de cámara también hay presencia mexicana. Gout llamó a su amigo Luis Sansans para ser el director de fotografía.

Para el realizador, lo más complicado de la producción fue hacer todo lo que planteaba el guión apocalíptico ateniéndose al presupuesto.

“Tienes que acudir a Tiburón de Spielberg, donde se le descompuso el tiburón todo el tiempo y por eso es tan aterrador, porque no lo ves hasta el final. Aunque se ve muy grande, no teníamos esas condiciones y eso fue el reto real de principio a fin”, finalizó.

Con información de AP