“Sí tengo miedo”: Julio César Chávez confesó sus temores previo a su última pelea con Héctor Camacho Jr.

Este sábado el pugilista mexicano Julio César Chávez se enfrentará este sábado al boxeador puertorriqueño Héctor Camacho Jr., hijo el ‘Macho’ Camacho

Julio César Chávez, el hombre considerado como el mejor boxeador de México, tendrá este sábado su última pelea frente al puertorriqueño Héctor Camacho Jr., hijo el ‘Macho’ Camacho, pugilista con el que se enfrentó en 1992 en las Vegas. A sus 58 años, Chávez dice estar preparado para disputar lo que sería la última pelea de su carrera, con un enfrentamiento que aunque, muy corto, de forma profesional, por lo que tuvo un arduo entrenamiento.

En una entrevista realizada por la periodista María Antonieta Collins, de Univisión, previo a la pelea, en la que el pugilista confesó que le ha costado mucho sacrificio prepararse. Mencionó que el hijo de Macho Camacho, su contrincante, lo “agarró personal”. “La pelea con Macho Camacho ha sido la pelea más mediática en la historia en México, no ha habido otra, ni en la actualidad, ni en el pasado, y la verdad fuimos enemigos arriba del ring, pero abajo fuimos muy amigos, de parranda, y es por ese recuerdo que acepté hacer la exhibición”, mencionó Chávez en la entrevista con Collins.

Para prepararse, Chávez tuvo que irse a entrenar a 4,200 metros sobre el nivel del mar, lo que fue muy difícil para él, “estuve allá dos semanas y me bajé rápidamente porque pegarle al costal es una cosa, pero ya subirte a un ring con careta, tú sabes que los golpes con la careta son más peligrosos que sin careta, porque te retumba el cerebro, y si ha habido muchos derrames cerebrales”, dijo el pugilista mexicano.

Habló sobre las clínicas de rehabilitación que tiene en Tijuana, Baja California y Culiacán, Sinaloa, y dijo que las peleas de exhibición son justamente para sostenerlas.

También dijo tener miedo. “Hay miedo, sí tengo miedo, la verdad, subirme con un joven 20 años menor que yo, 20 libras más pesado que yo, se reciente más el golpeo, y sí es exhibición pero arriba del ring se calienta la sangre”.

“Mis hijos no quieren, mi esposa tampoco quiere, el doctor tampoco, nadie, pero yo voy a tratar de hacer un round sin careta y que sea lo que dios quiera”, mencionó.

Quién es Héctor “Macho” Camacho Jr.

A lo largo de su carrera profesional, Julio César Chávez enfrentó a más de 100 boxeadores. En sus 115 enfrentamientos consolidó un legado que lo hizo superar a sus rivales en 107 ocasiones. A pesar de sus éxitos, a sus 58 años decidió enfrentar al hijo de uno de sus más grandes rivales, Héctor “Macho” Camacho Jr. quien se subirá a los encordados y será el último oponente del Gran Campeón Mexicano.

Héctor Camacho Jr. nació en San Juan, capital de Puerto Rico, el 20 de septiembre de 1978. En 1986, cuando tenía ocho años, decidió incursionar en el ámbito del pugilismo. Sin embargo, sobre sus hombros cargó con el enorme legado que su padre construyó a lo largo de su carrera. De esa forma, se mantuvo como boxeador amateur durante 10 años. Fue hasta 1996 cuando se sintió listo para incursionar en el circuito profesional.

El 1 de octubre de dicho año, en el War Memorial Auditorium de Nashville, Tennessee, Estados Unidos, se midió ante Lou “Rocky” Martínez, quien ya contaba con ocho duelos de experiencia, en los que acumuló cinco victorias por tres derrotas. Fiel al comportamiento de quien se mide a un profesional por primera vez, los primeros rounds de Camacho fueron caracterizados por su cautela y espera por un posible error de su oponente.

Logró soltar algunos golpes, pero con el avance de los asaltos comenzó a tener mayor confianza y fue más frontal en sus ataques. En el quinto round, Camacho tundió a Martínez con un potente gancho de izquierda que descansó sobre su pierna, el cual fue considerado ilegal. A pesar de ello, el combate siguió su curso. La agresividad de Rocky fue superada por la determinación del “Machito”.

Después de disputar 12 rounds, los jueces decidieron darle la victoria al hijo de la leyenda por decisión unánime, a pesar de que los testigos de la pelea fallaron a favor de su oponente. Desde entonces, se mantuvo invicto durante los siguientes cinco años, por lo que generó expectativas entre los nostálgicos del boxeo que buscaron la reencarnación de las cualidades y éxitos de su padre en el Jr.

Con Información de AGENCIAS